miércoles, 9 de octubre de 2013

LA INTENCIÓN DEL VIVIR

Estamos todo el día respondiendo preguntas difíciles cada día, y se nos olvida el disfrutar, el vivir, el respirar, estamos en una realidad, en un mundo, es un esquema que nos agota, nos desarma y nos quita nuestra esencia. Debemos cumplir, rendir y producir, actividades que nos hace olvidar lo que somos, somos seres  vivos, que piensa, siente y reacciona. Se nos olvida el pasado, ese pasado que es nuestra historia, historia que es autónoma, que viene y va como aquella brisa marina que nos devuelve la energía. Nadie manda el pasado, cuando aparece en esta realidad, nos confunde, distrae, pero a la vez nos remece, nos remece pegándonos una bofetada diciéndonos “Ey!, despierta, esto no es todo, hay algo más allá de lo que ves”. Estamos ciegos ante tanta nebulosa de la rentabilidad máxima de la empresa.

Y aquí como todo "rutero", tenemos dos opciones de camino a seguir. La primera opción es transformarnos en un ser renovable, que desde el reconocimiento de nuestros errores, pecados, y faltas renovar nuestras energías desde este “espíritu”, que en simples palabras es recordar de dónde venimos, de trasladarnos a través de nuestra conciencia de que capullo escapamos para enfrentarnos a este mundo, que no es el que nos dijeron cuando chicos, es diferente, por lo general  oscuro, intolerable e individualista y aún más espantoso, es un mundo irrespetuoso de lo que pensamos, sentimos y expresamos, ya que si no estamos en el esquema establecido, desaparecemos, somos invisible. 

Prefiero desaparecer antes que limitar mi pensar.

La segunda opción que no recomiendo, es la de ser un SER no renovable, que la modernización se lo devoró, cuya forma establecida de actuar desterró el conocimiento, desterró la maravillosa acción de pensar que nos pasa, desterró al hombre a un lugar de reparto, en vez de ser el protagonista de la vida..

Si me dieran a elegir entre SER un dato simple y una persona que entregue simples datos a los demás, prefiero ser aquel SER que siente, dialoga, interpreta para los demás los sucesos de la realidad. Mi intención es vivir como el que sueña, comparte dialoga, opina, reclama, se enoja, pero se reconcilia, que es orgulloso, pero es el primero en arreglar el caos.

El hombre ser vivo completo  íntegro,  que no es un punto en el gráfico, que vive pensando como dejar una huella imborrable, Quiero transformar el mundo pero desde el  mundo, no puedo restar de lo que está pasando de Él, este mundo que muchas veces destruye mi ánimo y mi físico, no destruirá mi intención de vivir plenamente.


Crea y vive desde la intención de vivir, ¿como alimentar esa intención?.

Simple, despierta y piensa que HOY es un buen día para vivir

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